La restauracion de piezas bordadas es harto complicada y en la mayoría de los casos muy costosa económicamente, por ello muchas cofradías optan por arrinconar esos enseres y hacer unos nuevos. Existe un punto intermedio, éste es: cuando la pieza mantiene el bordado en bastante buen estado, la tela está muy deteriorada y es factible su traspaso a una tela base nueva. Caso concreto: un manto se moja durante la procesión y no se seca como se debiera, el terciopelo encoje y produce bolsas, la única solución es traspasar el bordado a un terciopelo nuevo.
El trabajo consiste en limpiar el bordado, restaurar las partes dañadas para posteriormente aplicarlo a la tela mediante un cordoncillo del mismo material. Así conseguimos que no se pierdan piezas antiguas.
Se suele hacer mucho con reposteros eclesiásticos, cuando un prelado toma posesión de una sede hay que incluir su escudo en varias piezas, generalmente tapices o reposteros. Para no hacerlos todos nuevos, se extrae el escudo del anterior inquilino(Obispo, Arzobispo o Cardenal) y se acopla el del nuevo. Antes de jubilar ese manto, estandarte, palio, túnica….consulte con un taller especializado, ahorrará dinero y volverá a tener la pieza heredada en perfectas condiciones.
Traspaso tela nueva
Estandarte en fase de traspaso del bordado a una tela nueva
Restaurar y Traspasar
Estandarte anterior después de restaurar y traspasar el bordado
Terciopelo estropeado
Manto antiguo con el terciopelo bastante estropeado
Manto Dolorosa de Tobarra
Manto anterior después de restaurar y añadirle unas rosas bordadas para mejorarlo. Pertenece a la Dolorosa de Tobarra
Restaurado óleo nuevo
Estandarte restaurado traspasando todo el bordado y haciéndole un óleo nuevo
Manto raso nuevo
Manto antiguo después de traspasar el bordado a un raso nuevo. Se hizo para la pablación de Turís